Querida,
Primero que nada, no te entusiasmes con ninguno de los muchachos bobos que te presentó la amiga de tu amiga del colegio. Los hombres valen verga, no importa cuando leas esto. No te sientas culpable por haber rechazado a ese muchacho. En unos años engordará, se pondrá feo y embarazará a una ex novia antes de embarcarse al ejército.
El sexo no es tan genial. Al menos no con los hombres. Nadie va a complacernos más y mejor que nuestra mano y nuestra imaginación. Y qué suerte que estas mismas herramientas te sirvan para escribir.
Ya no veremos tanto anime como antes. Aun no hemos escrito un manga ni mucho menos tenemos un anime. Pero seguimos dibujando… digamos que mejor. Bueno, tenemos un webcómic, sí. Nos va bien. A la gente le gustan nuestros chistes malos. Por otro lado, Inuyasha sigue sin existir, y es mejor así. Sasuke Uchiha no es tan malo. Lo malo es la trama de Naruto. Ah, y seguimos escribiendo, oh, sí. Y esto sí muchísimo mejor. Ya casi sacamos nuestro primer libro de cuentos.
Te darás cuenta que no te gusta tanto Stephen King como creías, pero tienes que leer más de sus historias para saberlo. Escribe creepypastas. Termina y atesora esos fan fiction. Sigue divirtiéndote con los intentos de cuento de terror. Estás disfrutando de escribir y no lo sabes.
No hemos pisado Italia, ni siquiera en Google Maps. Todavía vivimos con mi mamá, aunque ya no en Mamatoco. Mi papá se va, y será doloroso. Aún no lo superamos. Era tu Dios, pero hasta a él lo crucificaron. A la víspera de treinta años seguimos llorando como si tuviéramos cinco, pero ahí vamos.
El alcohol deja de saber amargo con el tiempo, y al lado de ella, la sonsacadora, sabe mejor. Ya sabrás quién es, Ya nos tomamos más de una Club Colombia, aunque la Heineken es más sabrosa.
Nos sentiremos como mierda en unos años, pero habrá días buenos. Serán años difíciles de aquí en adelante. Aférrate al arte. Dibuja. Escribe. Lee a Camus. Todavía no vivimos de escribir, pero lo intentamos. De eso se trata. Intentar. Intentar. Intentar. Nos necesitábamos tanto, y ya nos estamos encontrando.
Valgamos verga, y que nos valga verga. No te odias, solo no te conoces. Toma más agua. Ah, y córtate el cabello, al estilo pixie, pero ya.
Atentamente,
Tu yo de veintiocho años.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario